La Matanza: uno de los distritos con mayor litigiosidad de la Provincia
Desde la Gral. Paz hasta Cañuelas, un breve análisis de las principales dificultades del servicio de justicia
El Dr. Gonzalo Gallo Quintian es el titular del Juzgado N° 2 de La Matanza, un distrito ubicado en el corazón de la Provincia y golpeado por las consecuencias que impone la falta de organismos para una gran población con demandas sociales cada vez más urgentes.
¿Cuáles son las problemáticas específicas del Distrito?
La Matanza tiene más de 2 millones de habitantes y la gran mayoría se encuentra en una situación social de enorme vulnerabilidad. Alguna fuente periodística ha expresado que en su territorio de 325 km2 se da una reproducción a escala de la demografía nacional, en virtud de que, en su entramado social podemos encontrar claramente contrastadas las tres franjas sociales: clase acomodada, media y pobre.
A su vez, existe un constante incremento de la población debido a la alta tasa de natalidad y de la inmigración interna nacional y extranjera.
El distrito se extiende desde la avenida General Paz hasta Cañuelas, por lo que tenemos todo tipo de situaciones socioambientales que atender –desde complejos habitacionales inmensos hasta viviendas rurales- y que influye en la tarea diaria. En lo que respecta a los inconvenientes que esto produce en el servicio de justicia, se pueden enumerar algunos evidentes. Uno de ellos es llegar hasta los juzgados, que están centralizados en la ciudad de San Justo y que puede significar muchas horas de traslado, ya sea por el tránsito o por la distancia. Si bien el proceso de digitalización ha resuelto algunos aspectos, todavía es necesario realizar de manera presencial muchas audiencias o entrevistas del Fuero. Siguen siendo muy pocos organismos –en comparación con otras departamentales- para la gran cantidad de personas. Recién hace unos pocos años se sumaron 2 juzgados más, pero tenemos 11 para más de 2 millones de habitantes, lo que se traduce en unos 200 mil por organismo, cuando en otros lugares es mucho menor la litigiosidad y cuentan con más dependencias para atenderla.
¿Tienen juzgados vacantes?
Sí, desde hace años. Lamentablemente falleció uno de los jueces nuevos que se había incorporado y se jubiló una de las magistradas que habían enviado del cuerpo de magistrados suplentes, lo cual complejizó aun más la situación. Tenemos 4 juzgados vacantes y es usual tener a cargo 2 dependencias, y hasta 3 ó 4 en forma simultánea, cada vez que se otorgan licencias por vacaciones o enfermedades de colegas.
¿Cómo es la vinculación con otros organismos del Estado municipal?
El gobierno municipal se ve obligado a expandir sus redes constantemente, exigido por los desafíos generados de la gran extensión territorial y la creciente demanda de asistencia. La realidad es que el personal municipal abocado a esas tareas tiene muy buena voluntad y predisposición, pero la demanda social es tan alta que siempre resulta insuficiente, y se nos complica mucho en todo lo que necesariamente vincula a un juzgado y un organismo del Ejecutivo, en particular cumplir con plazos y requisitos establecidos para los informes, por ejemplo en las medidas de abrigo.
En materia edilicia, 4 de los juzgados estamos en un edificio especialmente construido para alojar dependencias judiciales, pero los restantes organismos aún permanecen muy dispersos, y muchos no son funcionales, por contar con escaleras que dificultan el acceso.
Alta litigiosidad
“El grado de litigiosidad de nuestro Distrito es alto y complicado. Tenemos un ingreso de expedientes mucho mayor que el promedio de cualquier otro juzgado a nivel provincial e incluso nacional me atrevería a decir, con una o dos excepciones. Sin dudas, este hecho afecta directamente el servicio de justicia que se brinda a la comunidad, esto sin incluir como variable otra cuestión no menos importante: la complejidad de cada caso, agravada por cuestiones sociales.
Lamentablemente, a mi entender contamos con una desmesurada judicialización de cuestiones que no deberían serlo, como por ejemplo las evaluaciones psiquiátricas, que se suma a la lista de complicaciones que afrontamos día a día quienes trabajamos en la justicia de Familia, pero que no podemos superar por la dinámica del distrito y la gran cantidad de comisarías, hospitales y demás dependencias con las cuales debemos coordinar labores”, subraya Gallo Quintian.